La importancia del mantenimiento de los frenos

La importancia del mantenimiento de los frenos.

El mantenimiento de los frenos es una cuestión sencilla que idealmente se debería realizar de manera periódica. Su buen funcionamiento es muy importante para evitar accidentes, además de que garantiza el rendimiento y la perdurabilidad del vehículo.  

Para comprender mejor sobre la importancia del mantenimiento de los frenos en tu coche, veamos cuál es la seguridad que nos aporta a la hora de conducir.

Funcionamiento de los frenos

Al hablar de la seguridad de los vehículos, el sistema de frenos es uno de los elementos más importantes. Estos nos permiten regular la velocidad en determinados momentos de acuerdo a las necesidades. Es decir, nos permiten disminuirla, estabilizar, esquivar obstáculos o anular el desplazamiento por completo.

Esta funcionalidad de los frenos puede ser positiva durante largos periodos de tiempo si se los mantiene gradualmente. Ya que el desgaste de los mismos se produce frenada tras frenada, rozando los discos y las pastillas de frenos.

Los discos y las pastillas de freno crean la fricción necesaria para que se pueda disminuir la velocidad del vehículo, sea cual sea el motivo por el que lo hagamos. De acuerdo al modo de conducir, el terreno o si se ejercen aceleradas o frenadas fuertes el desgaste se produce con mayor rapidez.

Como para tener una idea, en condiciones ideales los componentes de los frenos tienen una durabilidad de entre 15.000 y 20.000 km. Pero de vuelta, habrá que prestar atención al uso que se le da al vehículo y la relación que se establece con las frenadas.

Ahora bien, la correcta respuesta de los frenos no depende solo de los discos y las pastillas, sino que hay otros componentes que conforman el sistema de frenado y a los que hay que brindarles atención.

Componentes del sistema de frenos

Algunos componentes requieren de cambios de sus partes en periodos más cortos de tiempo y otras pueden esperar un poco más, veamos cuales son:

Pedal: es el componente en contacto directo con el conductor y no tiene una vida útil predeterminada. Se utiliza presionando para disminuir la velocidad y puede ajustarse de acuerdo al grado de fuerza que el conductor pueda utilizar para frenar. 

Servofreno: Se refiere al hidrovacio y es el que multiplica la fuerza del pedal y la dirige a todo el sistema de frenado. 

Líquido de frenos: son aceites que brindan resistencia y elasticidad para transferir la fuerza de frenado a las ruedas. No se puede reemplazar por otro tipo de líquido y deben cambiarse idealmente cada 50 mil kilómetros o cada 2 años si es que en el medio no hay ninguna avería que requiera de su cambio.

Cilindro maestro: este componente se encarga de llevar el líquido de frenos a los pistones de las pinzas de freno o de los tambores. Tiene una durabilidad aproximada de 1000.000 km.

Mangueras y tubos: las mangueras están diseñadas para actuar sobre los frenos y resistir las presiones que exige el frenado. Si el líquido de frenos está actualizado no hay grandes probabilidades de que se rompan.

Discos de freno y batería: los discos son los que reciben la presión de las pastillas, crean la fricción necesaria para que el vehículo detenga la marcha. La señal de que un disco está dañado es que el coche tiembla al frenar. Sin embargo, que el disco se dañe no quiere decir que la batería esté también dañada. Ambos componentes no tienen una vida útil establecida.

La importancia del mantenimiento de los frenos.

Señales de que los frenos necesitan mantenimiento

Es importante saber entender las señales de nuestro vehículo de que algo no está funcionando de manera correcta, principalmente cuando del sistema de frenos se trata. 

Pero teniendo en cuenta que hay señales que pueden ser en principio imperceptibles si no tenemos un buen conocimiento automotriz, debes tener en cuenta que en términos generales una vez al año o luego de los 10.000 km debes realizar una revisión de cada uno de los componentes de los frenos. 

Pero ten en cuenta que los fabricantes suelen hacer sus propias recomendaciones, algunos pueden indicar hacer revisiones a los 5.000 km de uso y otros luego de los 15.000 km.

En cuanto a las señales que pueden estar diciendo que se necesita un mantenimiento de los frenos puedes encontrarte con que:

  • necesitas una mayor distancia de frenado,
  • disminuye el nivel del fluido de trabajo,
  • presencia de polvo metálico en alguna de las llantas,
  • ruidos y golpes poco comunes al frenar abruptamente

Otro indicador a tener en cuenta de que debes hacer revisiones periódicas casi de manera obligatoria, es si conduces largas horas por las ciudades. El hecho de conducir en zonas urbanas hace necesario frenar mayor cantidad de veces, a diferencia de la conducción que se da en rutas, autovías, autopistas o poblados.

Dicho todo esto, podemos volver a concluir en que el correcto mantenimiento de los frenos es una cuestión de seguridad vial y a lo que hay que prestarle especial atención para tener un desplazamiento seguro.

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