El proyecto Baseline, financiado por la Comisión Europea y desarrollado por un consorcio de 18 países, ha reunido datos sobre indicadores de Seguridad Vial. Dicho estudio revela que uno de los puntos fuertes de España es la velocidad y uno de los puntos a mejorar es el uso de las sillas infantiles.
Este estudio se llevó a cabo entre los años 2020 y el 2022. Ocho de los puntos recopilados para el análisis y la valoración de la seguridad vial, están relacionados con el comportamiento de las personas, vehículos, infraestructura y atención post accidente.
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha participado en dichos estudios a través del Observatorio Nacional de Seguridad Vial. Las conclusiones obtenidas han dejado un sabor agridulce para España.
España ha obtenido resultados medio-altos en aspectos relacionados con el uso del cinturón de seguridad, representando un 94% de cumplimiento; a su vez, el casco en carretera, tanto en bici como en moto, cuentan con un cumplimiento del 90% y el 100% respectivamente.
En cuanto al respeto del límite de velocidad, en autovía se respeta un 63%, en autopista un 51%, y en carreteras convencionales, solo respetan los límites de velocidad un 43% de los conductores.
Algunos de los comportamientos que son necesarios mejorar en España, son el consumo de alcohol los fines de semana, con el mayor porcentaje de positivos, representados por el 11% de la muestra.
Otro factor a mejorar es la utilización de los sistemas de retención infantil (SRI), también conocidas como sillitas infantiles. Solo el 46% de los conductores cumple con este requisito, lo que supone el valor más bajo entre todos los países que fueron analizados en este estudio.
Al proyecto Baseline, le dará continuidad el proyecto denominado “Trendline”, en el que ya se está trabajando. En este proyecto se analizarán los datos de 25 países. En este estudio se avanzará en la homogeneización de las metodologías de elaboración de los indicadores. A su vez, se investigarán indicadores experimentales adicionales.
En este sentido, la DGT analizará la viabilidad de incorporar indicadores sobre el nivel de seguridad de la infraestructura y el tiempo de respuesta posterior a un siniestro.
